jueves, 19 de abril de 2012

Grandes Enigmas del Siglo XX - Ku Klux Klan





Nota: Los videos están ordenados del 1 al 5 de arriba hacia abajo.

Comentario:

No sé como los humanos hemos sido capaces de tal atrocidad y como los demás hemos dejado hacerla.

Para empezar hay que volver al siglo XVII con el tráfico de esclavos y contar desde cero las vidas de hombres negros que se han ido, pero no honestamente, sino muchas tiradas al mar, otras tiradas en desiertos y otras desgraciadamente torturadas, seguramente se nos hubieran acabado las ganas de reír durante mucho tiempo. Pero para entonces y hasta no hace más de un quarto de siglo, la superioridad moral nos corroía por dentro y por ende la valoración que teníamos sobre nuestra naturaleza (África) no existia y parece mentira como podía ser verdad. Mas tuvimos que esperar tanto tiempo a darnos cuenta? --> (hasta el apartheid, 1989) Por eso pienso que las personas que causaron tanto daño lo hicieron porque tenían miedo, y el miedo nos permite hacer cosas atroces y encima a gran escala si tienes el poder. E aquí una de mis vinculaciones sobre las debilidades humanas. Y también pongo otra de mis ideas constantes de las que no me canso de repetir y es la otra cara de la moneda: ¿Te imaginas un mundo gobernado por la gente de raza oscura, y que los de raza clara estubieran sometidos a su régimen? Yo sí. Y mucho diran que "estas loco" o "en que piensas", pero nuestro presente ya nos lo han dado bien masticado para que sea fácil tragarnoslo, pero nunca se sabe cuales son las posibilidades del futuro ya que el futuro ni ahora ni nunca estará escrito por ningún ser humano, sino que el futuro es el aire que respiramos, el día día y sobre todo nuestras acciones. Y para acabr volviendo al tema principal, pienso que hemos de valorar más cada paso que damos hacia delante y no dormirnos ni dejar nuestro rumbo porqué si estamos donde estamos es por el pasado que no conocemos pero si el presente que tenemos ante nosotros.


domingo, 15 de abril de 2012




La escala más pequeña del universo –la que se rige por las leyes de la física cuántica– parece un desafío al sentido común. Los objetos subatómicos pueden estar en más de un sitio a la vez, dos partículas en extremos opuestos de una galaxia pueden compartir información instantáneamente, y el mero hecho de observar un fenómeno cuántico puede modificarlo radicalmente. Pero lo más extraño de todo –según le explica el físico de la Universidad de Oxford, Vlatko Vedral, a Eduard Punset en este capítulo de Redes– es que el universo mismo no estaría compuesto de materia ni de energía sino de información.


Conentario:
Podemos afirmar que por mucho que el conocimiento del hombre se expanda, la verdad total no estará a su alcance, y por ende, la incertidumbre en diversos grados será su necesaria compañera. Debemos buscar nuestros mecanismos psicológicos que nos permitan manejarla, y convencernos de su necesidad.

jueves, 5 de abril de 2012

Encontrando el camino a la felicidad


Solía pensar que había un camino hacia la felicidad, y que, si llegabas a ese camino, terminabas en algún lugar maravilloso, como si la felicidad fuese el destino. He estado en un montón de caminos, y aunque muchos de ellos conducían a lugares hermosos, aún no encontré el camino que me lleve a ese sentimiento maravilloso llamado felicidad.
La gente suele pensar que si encuentra la combinación correcta de factores externos, pueden encontrar la felicidad. Compran un montón de cosas nuevas, viajan a lugares interesantes, comen, toman, se drogan, o buscan a “alguien perfecto” que piensan que los va a hacer felices. La mayoría de ellos simplemente busca cambiar su estado emocional con objetos externos o acciones.

Camino a la felicidad

Desafortunadamente, el ser humano no funciona de esa manera. Por lo general, cuando buscas la felicidad fuera de ti mismo, ésta termina siendo temporaria. Puedes ser feliz al principio con tu nuevo auto, pero cuando deja de ser nuevo va a necesitar reparaciones, y vas a terminar pasando a otra cosa. Comer demasiado, tomar, o usar drogas traen consecuencias al día siguiente. La gente sigue intentando encontrar la combinación mágica fuera de sí mismos, y terminan usualmente decepcionados. La felicidad no es un lugar específico, y no hay ningún camino mágico para encontrarla. Debe ser un propósito de vida. Es una combinación de aspectos emocionales, intelectuales y espirituales que viene desde el interior nuestro. Esto significa que nosotros creamos, en gran parte, las condiciones para nuestra propia felicidad. El camino a la felicidad está dentro de nosotros. Se fundamenta en cómo vemos nuestras propias vidas. La forma en que pensamos afecta nuestros sentimientos; debemos ser honestos al respecto. Cuando nos acercamos a las cosas con una actitud positiva, por lo general, nos sentimos mejor. Como la mayoría de los estados del ser humano, no nos sentimos de esta forma todo el tiempo. A veces la sentimos, a veces no. Todos tenemos altibajos. Esto significa que no existe la felicidad para siempre, a no ser que tengamos una vida de ejercicio espiritual permanente.

Encontrar la felicidad

Sin embargo, vale la pena buscar la felicidad a través de un programa de desarrollo personal. Creo que la felicidad es lo que obtenemos cuando estamos en sintonía con nosotros mismos. Es lo que experimentamos cuando vivimos la vida que deseamos que vivir, logrando cosas que queremos lograr, y, sobre todo, disfrutando en el proceso de hacerlo. Esto no significa ser narcicista. Todo esto incluye prestar atención a nosotros mismos, y lo que queremos para que nuestra vida esté físicamente, emocionalmente y espiritualmente bien. Esto también incluye prestarle atención al mundo fuera de nosotros, apreciando a otras personas y a la naturaleza. Si estás trabajando para ser la mejor persona que puedas ser, transformando tu conciencia, y estableciendo y cumpliendo los objetivos que son apropiados a tus valores, creo que estas en el camino a la felicidad. Es un camino que tú creas de acuerdo a como vives tu vida. La felicidad no es el punto final del viaje, es parte del proceso maravilloso de vivir la vida cotidianamente! El camino no es para llegar a ella, sino que es el camino en sí lo que realmente importa.

Por Hugo Landolfi (filósofo)